Descripción
Si vivimos en un país donde casi no se lee, donde la comprensión lectora parece estar lejos de lo óptimo, escribir bien sería una tarea casi imposible; pero este texto demuestra lo contrario, podemos lograr una eficiencia en la escritura en pocas lecciones y este paso nos colocaría en el mejor nivel de comprensión lectora.
Escribir y leer son dos caras de la misma moneda por eso debemos explicar a los estudiantes, mujeres y hombres, de qué manera nos adentramos en el conocimiento, por qué quienes leen saben más, que la literatura como una de las bellas artes contribuye a nuestra inteligencia y nuestra belleza; con ejemplos comunes de la vida cotidiana o de nuestra cultura, como el pasaje de Blanca nieves que recibe la manzana de la bruja convertida en venerable anciana, la literatura no nos dice qué debemos hacer o cómo debemos comportarnos, sólo nos muestra lo que puede pasar si uno acepta algún regalo de un extraño, aunque se vea muy amable.
La afición a la lectura, ahora lo sabemos, se da por contagio y con temas que son de interés para quienes son nuevos o nuevas lectoras, parece evidente que la escritura debe recorrer un sendero semejante.
En este texto empezaremos por reconocer las dificultades propias de la lengua, pero, además debemos conocer las enormes ventajas que nos da acercarnos a ella desde la oralidad, como lo hacen los niños y las niñas pequeñas. Estas páginas pretenden ser una guía sencilla para escribir un texto desde un recado hasta un libro, que sea claro y con las reglas de escritura.